¿Sabes qué es la seguridad activa y pasiva?
Como expertos en seguros, en Tu Seguro Sin Secretos sabemos bien qué causas están detrás de los accidentes automovilísticos. Por eso queremos compartir contigo algunas medidas necesarias para lograr la seguridad en el coche. Recuerda que hay mucho en juego.
Las marcas de coches llevan décadas perfeccionando los aspectos técnicos de la seguridad vial: materiales, tecnología, protocolos legales... Todo esmero es poco para conseguir que una máquina potencialmente peligrosa sea una herramienta segura y confiable.
Las medidas de seguridad en el coche se clasifican en: seguridad activa (la que se encarga de prevenir los accidentes) y seguridad pasiva (la que procura reducir los daños cuando el percance ya ha tenido lugar).
- Los elementos de seguridad activa aseguran el control del conductor sobre el vehículo. Dentro de este grupo están: los neumáticos, los frenos, el sistema de antibloqueo de ruedas (ABS), el sistema de asistencia a la frenada de emergencia (BAS), el programa electrónico de estabilidad (ESP), la dirección asistida, el control de tracción (TCS), etc.
- Los elementos de seguridad pasiva reducen las consecuencias dañinas del accidente, tanto en el conductor como en sus acompañantes. Tales son: la carrocería, el airbag, el cinturón de seguridad, las sillas para bebés, los reposacabezas y las lunas del coche.
Aunque la idea de los ingenieros sea maximizar la seguridad activa y pasiva del coche, todos sus avances técnicos no sirven de nada sin un conductor cauto y un mantenimiento periódico de los distintos elementos que componen dichos sistemas de seguridad.
A lo largo de nuestros posts iremos desgranando útiles consejos para que sepas en todo momento qué labores de mantenimiento hay que hacer para tener un coche en óptimas condiciones.
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¿Conoces la importancia que tiene el parabrisas para la seguridad del coche?
Cuando hablamos de seguridad del coche y mantenimiento, muchas veces nos olvidamos de los elementos más importantes, como los neumáticos o el parabrisas... Parece que solo nos acordamos de ellos cuando se rompen, ¿verdad?
El parabrisas es un elemento de seguridad pasiva esencial, lo tienes delante mientras conduces… ¿Te has parado a pensar alguna vez la cantidad de funciones que cumple?
- La luna del coche mejora nuestra visibilidad y nos protege de elementos externos (lo que es fundamental a la hora de reaccionar rápidamente en la carretera).
- El parabrisas permite reducir la energía que emplea el motor para avanzar. Es básico, por tanto, para ahorrar combustible.
- Junto al cinturón de seguridad y al airbag, el parabrisas impide que, en caso de colisión, salgamos despedidos (lo que aumentaría significativamente nuestras lesiones).
- El parabrisas actúa como soporte: de no ser por él, el techo del coche se hundiría en caso de volcar.
- Un parabrisas bien instalado es fundamental para que el airbag funcione correctamente.
- El parabrisas sirve de soporte para colocar los sistemas de asistencia a la conducción.
¿Cómo limpio las lunas de mi coche?
Sin un parabrisas en condiciones, despídete de tener una correcta visibilidad mientras conduces. La importancia de este elemento de seguridad pasiva requiere que te tomes en serio su mantenimiento.
Todo mantenimiento pasa, en primer lugar, por limpiar bien el parabrisas:
- Puedes llevar tu coche a una gasolinera o limpiarlo tú mismo con una hidrolimpiadora o, simplemente, con ayuda de una esponja y un cubo con agua caliente y jabón.
- Asegúrate de que no quedan restos químicos en el parabrisas (para ello usa un limpiacristales a base de alcohol y sécálo con un paño que no deje restos textiles).
- No uses los mismos útiles que has utilizado para limpiar el resto del coche.
- Si aplicas cera a tu coche, elimina los restos que hayan podido quedar adheridos a la superficie del parabrisas.
- La correcta limpieza de las lunas hay que hacerla tanto por su cara exterior como por la interior.
La limpieza del parabrisas, ya lo hagas tú mismo o un profesional, es un momento idóneo para comprobar con detalle el estado en el que se encuentra.
Daños en el parabrisas: una amenaza para la seguridad del coche.
El parabrisas está sometido a un continuo desgaste: polvo, viento, insectos, nieve, lluvia... y Y resistir la acción de los elementos le acaba pasando factura. Pues bien, NUNCA ignores los síntomas de desgaste.
Los desperfectos en el parabrisas, según su causa, presentan diversas formas: rayas, pérdida del laminado plástico que lo recubre, ‘bull eye’ (desconchados), estrellas, puntitos… Todos ellos son sinónimo de problemas, incluso cuando se hayan fuera de nuestro campo visual.
Existen ya sistemas que, en la mayor parte de los casos, permiten reparar las lunas del coche sin necesidad de cambiarlas. Eso sí, siempre que el problema se coja a tiempo.
Recuerda que llevar este tipo de desperfectos en el parabrisas suele ser motivo de rechazo en la ITV.
Aumenta la vida de tu parabrisas y la seguridad del coche con un buen mantenimiento.
Llevar a cabo un correcto mantenimiento de las lunas no solo es rápido y sencillo, sino que también puede ahorrarte bastante dinero, haciendo que tu parabrisa te dure mucho más y que cumplan sus importantes funciones de la mejor manera.
- Mantén la distancia de seguridad con el coche de delante: no respetarla es la principal causa de desgaste del parabrisas.
- Procura no pasar por superficies irregulares (caminos sin asfaltar, carreteras con baches o mal asfaltadas, etc.).
- Ante cualquier desperfecto en el parabrisas, por pequeño que sea, lleva enseguida tu coche al taller (recuerda que siempre es más barato reparar el parabrisas que cambiarlo).
- Si se ha formado una capa de hielo sobre el parabrisas no uses agua caliente para descongelarlo, emplea la calefacción o sustancias anticongelantes. Para desempañarlo pon el aire acondicionado.
- Procura evitar los cambios bruscos de temperatura entre el interior de tu coche y el exterior (tu coche no debería ser una sauna en invierno y un iglú en verano).
- Los limpiaparabrisas en mal estado arañan las lunas, así que renuévalos anualmente (procura hacerlo antes de las épocas más lluviosas).
- Limpia bien tu parabrisas una vez por semana y llévalo a revisar por un profesional al menos una vez al año.
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